PRESENTACION
PRODIGIOSA BLASFEMIA
DE ALFONSO VELIS TOBAR
Cesar Ramirez (Caralvá)
Fundador
Suplemento Tres mil
De Ediciones La Fragua, San Salvador,
2016. 51 p. es una constante de poesía que recuerda el tema clásico de Dios y
la Humanidad, en nuestra realidad salvadoreña la preguerra, la guerra y Acuerdo
de Paz han significado la lectura literaria de diversos tonos que traducen los
motivos del autor, es la historia social la predominante en las expresiones
artísticas, así los años setentas y ochentas mostraron el rostro de la sangre,
la violencia extrema, de igual forma su contraparte: sublime, heroica,
fraternal; uno podía observar en los actores esas características humanizadas,
aterrizadas en personas, encarnadas en seres humanos que sin pronunciar palabra
eran conceptos históricos-sociales-religiosos, ellos no mentían.
Cada persona lee lo que quiere leer,
así en el libro Prodigiosa blasfemia el concepto Dios es una constante, desde
su inicio la cita de Mario Benedetti, (Si Dios fuera mujer): “ Ay Dios Mío,
Dios Mío si hasta siempre/ y desde siempre fueras una mujer/ Qué lindo
escándalo sería, que venturosa,/ espléndida inagotable, prodigiosa blasfemia”…
nos permite visualizar el conjunto de la obra, en el tiempo que vivimos después
de 25 años del Acuerdo de Paz, el signo del caos se pronuncia en la guerra
civil, otro demonio es la posguerra y la nueva realidad, demandando una
estabilidad aún no encontrada en el año 2017. Los capítulos del texto son
relevantes: De dioses ángeles y demonios, ritual del amor, conversaciones con
fantasmas y las arenas del tiempo, constituyendo un sistema de 32 poemas.
Un
libro de esta naturaleza constituye un intento de cerrar todas las heridas del
violento pasado, sin olvidar el surgimiento de nuevos fenómenos: “Es un San
Salvador hormiguero que va y viene/esquivando las maras del crimen voy de
camino” (Tesis de mi sombra que vaga)… versos que atrapan la nueva realidad.
La demanda a Dios me recuerda a Dámaso Alonso en su libro: Hijos de la ira, con
el poema Insomnio: “Madrid es una ciudad de más de un millón/ de cadáveres
(según las últimas estadísticas)/ A veces en la noche yo me revuelvo y
me/incorporo en este nicho en que hace/ 45 años me pudro,/ y paso largas horas
oyendo gemir el huracán,/ o ladrar los perros, o fluir blandamente la luz/ de
la luna./ Y paso largas horas gimiendo como el huracán, /ladrando como un perro
enfurecido,/fluyendo como la leche de la ubre caliente/de una gran vaca
amarilla./Y paso largas horas preguntándole a Dios,/ preguntándole por qué se
pudre lentamente mi alma,/… así como Dámaso Alonso, Alfonso Velis insinúa: Y
Dios no responde… “¡Santo Cielo! ¿Dios? ¿Por qué no haces nada? ( A lo
Quijote)”, es la misma desesperación humana de la guerra y ahora en los años de
estabilidad democrática, aún existe violencia, desigualdad, injusticia en la
nación y en el mundo.
El exilio interno continúa en el poeta, las noches de frío, la indiferencia
metálica, la nostalgia de la tierra tropical en medio de otra nación glacial,
“Todo es blanco con la nieve/ la tormenta cubrió las ventanas/ Prados aceras en
London/ Mientras en mi país todo es verde/ (A alta hora de la noche),” es un
ajuste de cuentas entre las realidades: interna, externa, social e histórica,
pero acepta su destino combatiente: “Y uno quisiera que nadie sufriera/aquí se
aprende a vivir por nada/o se aprende a morir por algo…(Estoy poblado de
gritos).
Publicado por Suplemento Tresmil Diario Colatino. 21 de Enero de 2017.
POEMA- PROLOGO
! DIOS MIO! DÓNDE ESTÁS QUE NO TE ENCUENTRO!
Hola mi querido Alfonso Velis
Tobar
Perdona que no te haya
respondido
A la tarea que me has solicitado.
Te mando esta postal escrita
en facebook
Sobre este libro llamado “Prodigiosa Blasfemia”
Que me ha costado leer de un
solo golpe
Y que por sus tantas aristas
de pensamiento
He debido hacerlo con
paciencia
Y buena disposición para el
análisis.
No creas que por tus reclamos
a Dios por tantos hechos
Que lindan con una especie de
indiferencia calculada
De parte del Ser que todo lo
ha creado
Según los preceptos religiosos
Son verdaderamente
inapropiados
Y que alguien deba sentirse
culpable
Como un sujeto acusado por la
Santa Inquisición.
Te entiendo perfectamente mi
querido escritor
Hermano y compañero de este
viaje sin retorno.
Por ejemplo, ante la matanza
cruel y despiadada
De los judíos en aquella
Alemania del Fuhrer
En la “Noche de los cuchillos
largos”
Como podía Dios haberse
desentendido
Como dices tú:
“! Hay Dios mío!!Dios mío! Qué te has hecho”?
Pero mira como
son las paradojas de la Historia
Ahora los mismos
judíos de la Alemania Nazi
Son los asesinos
del pueblo palestino,
Ya lo dijiste
compañero,
“Tan cabrones
como los nazis en su tiempo”
Por eso me atrae
y apoyo siempre tu pregunta
Donde estás? Has algo en
la conciencia del mundo”
Contra esos
supuestos preferidos de Dios
Apoyados por el
demonio mismo de la OTAN.
Y no es que
blasfemes si no que es necesario
Parar esa
matanza inhumana de niños, jóvenes y adultos
De la tierra
Palestina, la vieja patria de un pueblo sacrificado.
Y bien por tu
reclamo y tu requerimiento a Dios.
! Has algo tú que sabes mover hasta montañas!
“! Tan solo
mueve un dedo mi Señor!”
Sin embargo, mi
amigo lejano,
No solo te
refieres a esos “Sionistas de mierda”
También reclamas
por los muertos de tu país,
El pequeño
coloso amado por Francisco Morazán
La estrella
matutina de nuestro futuro.
Porque tal como
expresas en tus versos
De niño solo
querías viajar imaginariamente
Como pájaro del
dulce encanto
Pero la maldad
de los poderosos
De los que
sorben la sangre de los humildes
Tal como
manifiestas: “Mi país llora sangre
que gotea
Todo el tiempo y donde la injusticia anda de
rondas por las calles”
Cambio la ruta
del sueño que debió ser reparador
En un país donde
la paz fuese el efluvio de todo lo generoso.
Tus blasfemias
son las mismas que lanzamos al aire
En estos parajes
de cuerpos sin sol
De jóvenes
patriotas asesinados
En la oscura
ladera de una esquina sin nombre.
Tienes razón,
Alfonso en blasfemar todo lo posible
Sin descanso,
hasta que Dios nos traiga una luz
Donde podamos
cobijarnos contra el frio
Que cubre a los
despedazados en la ignominia
De una noche sin
fin.
Y con esas frases
de esperanza que roe la entraña
Bien exclamas en
el más perfecto derecho del dolor infinito
“Y no es la
religión que crea al hombre
// Un día el hombre derribará al Dios//
Que ampara el tesoro que justifica al
poderoso”
Y no es casual
que grites finalmente
Asumiendo el
tremebundo desgarro humano
“! No seas
infame! Qué te has hecho?//
...! Hice mal
en decirte que te amaba!
¿Dios mío dónde estás que no te encuentro?”
Tu libro que es
a veces canción, a veces elegía,
Transido de
imprecaciones dolorosas
Es en realidad
un canto al hombre mismo
Que como decía
el español poeta
El hombre que
sobre todo sufre y que tú agregas
Sobre todo muere
abandonado en el recodo
Donde Dios olvido el camino.
Y te acompañó en esa
desgarradura mortal
De reclamo sin
fin “! No seas infame!
¿Qué te has hecho? // ! Pesadilla
que sueñas despierto!//
! Hice mal en decirte que te amaba!//
¿Dios mío dónde estás que no te encuentro?”
Galel Cárdenas
Poeta, escritor Hondureño.
Agradezco a mi esposa
Emmita, a mis hijos
por su contribución
de esta publicación
y los amo al alma.
Ay Dios Mío, Dios Mío si hasta siempre
Y desde siempre fueras una mujer
Qué lindo escándalo seria, que venturosa,
Esplendida, inagotable, prodigiosa blasfemia.
Mario Benedetti
(Si Dios fuera una mujer)
DE DIOSES ANGELES Y DEMONIOS
“La
noche de los cuchillos largos”
(Poema sinfónico)
-I-
Aquí en London
rodeado de inmigrantes
judíos
En
edades de ochentas
y noventas
Me
cuentan que escaparon a escondidas
De las
ergástulas cárceles alemanas
De sus
tenebrosos campos de
concentración
Condenados
a morir de torturas de terrible hambre
O
inanición de cadáveres vivientes
convertidos
En ardientes antorchas humanas
Cual
bolas de fuego rociados
Con gasolina o kerosene
Eran
niños estos viejecitos de hoy
En
brazos de padres se recuerdan rehenes
Otros
jugaban a las escondidas con la muerte
Judíos
inmigrantes me cuentan en sollozos
Y entre
la penumbra de sus ojos llorosos
Hombres
niños mujeres ancianos
Obligados a cavar sus propias tumbas
Es la
historia más trágica del siglo XX
Ana
Frank cuenta en su “Diario” la suya
¡La
zozobras, las angustias y que no dormían!
¡Dos
años sin ver al sol preñados de
silencio!
¡Terrible
horror de los horrores!
Ante el
genocidio terrorista de Hitler
Con sus
jaurías de perros del Tercer Reich
Sedientas
de racismo de persecución antisemita
Hitler llevaría al mundo a una segunda guerra
Esa
noche de 1934 noche de los “Cuchillos largos”
(“Noche
de los asesinos” hay ojos y testigos oculares)
Para
entonces allá en Berlín el cielo de
Alemania
Esa
noche lucia estrellada de un paramo lúgubre
Era la
noche y un miedo de aire fantasmal
Flotaba en sombras de la muerte
¡A torrentes corrían los fuegos y los gases!
¡Cuerpos
como pantes de leña
En
zanjas! muy aperchados
Aquellos
que sobrevivieron por milagro
Los
judíos no sabían su destino
Sin
saber la magnitud de sus desastres
Hitler propugnaba virulentos planes criminales
Para su exterminación total de la tierra
Pues
Hitler impresionaba voz que espantaba
Sus
generales le rendían culto
Y le
temían en reverencias
Y a
escondidas las drogas y las mujeres
Dicen que era su obsesión desde su bunker
¡Tanque
que arremetía con rabia blindada!
¡Quien
pensara mal de sus diabólica!
¡Ame(N)
(A) (Z) (I) (a) fascista!
Escribió “Mi lucha”… ideólogo que era
Elocuente
orador un vozarrón de huracanes
¡Hitler un tipo…. y eso solo es estar loco!
Un
psicópata desquiciado mental
Entre
los más criminales de la humanidad
Miles de
almas rendían le culto avasallador
Y decía que la raza Aria era la mejor del
mundo
Odiaba
el judaísmo el marxismo el comunismo
Quizás Hitler
Herodes que mató a su madre Agripina
Después
de Hitler Nerón que dio fuego a Roma
El que
crucifico a Pedro boca abajo, el de las llaves
El celador
de las puertas del cielo el “segurite” de Dios
Hitler
Calígula que nombró cónsul de Gobierno a
su caballo
Sacrificando
en las catacumbas a cientos de miles de cristianos
Echándolos
a hambrientos leones en la Arena del Coliseo
Romano
Los
Monstruos gozaban esa fiesta bacanal de sangre
Sus
cónsules procónsules y senadores a carcajada cruda
Bien
hartados tuncos bañados en vino tinto
Rodeados
de putanas mujeres gozaban sus maldades
La
historia se repite en otros crápulas del crimen
Encarnados
en el fantasma del “Fuhrer” los
dictadores del pasado
Como los
genocidas de América en la historia del mundo
Guardianes
de imperios sirvientes de capataces
mayores
Todos son “hijos de la gran puta” fichados ya están
¡En el
infierno todas sus maldades pagaran!
Aunque
con Hitler fueron millones de muertos
Atentando contra la paz del mundo
¡Pero
miren ya van cayendo los ídolos sagrados!
-II-
Mire
Ud., la historia es una paradoja
¡Porque eso inhumano degradante!
Como los
Nazis hicieron a los judíos en su tiempo!
Ahora
injustamente los Sionistas de Israel
Están lo
mismo haciendo padecer
El mismo
holocausto de sangre a sus vecinos
Matando
hermanos Palestinos
Que
desde palabras bíblicos
Defienden
su territorio contra el invasor
Es una
ironía la humanidad un paradigma
¡Tan
cabrones como los Nazis en su tiempo!
¡Estos
Sionistas de mierda! ¡Sin misericordia!
¡Vienen
a sangre fría arremetiendo a Palestina!
Ahora
niños jóvenes ancianos y de otras etnias árabes
Viven angustiados
y con abrumada desesperación
Ahora mismo masacrados en la franja de Gaza
Por bombas criminales que lanza
¡El Pueblo Elegido por Dios! La tierra de
Israel
Más bien elegido por el Diablo mismo de la OTAN
Y dirigidos por esa rapaz alma negra del
imperialismo yanqui
Y sus
aliados que invaden con rapiña otros
países
Alguien
escupa hacia arriba la escupida caerá en su cara
¡Yo solo blasfemo con mis prodigios
infernales!
¿Dios si estás ahí en mi camino habla?
¡Interpone
tus ojos tu justicia divina!
! ¡Ay Dios mío! ¡Dios mío!
¿Qué te has hecho?
¿Dónde
estás padre mío?
¡Haz
algo en la conciencia del mundo!
¡Has
algo tú que mueves hasta montañas!
¡Tan
solo mueve un dedo mi Señor!
Ecuación
de desencantos
¿Cambiarán
en realidad las cosas?
¡Quiera
Dios! -- Dice alguien que estaba oyendo
por ahí
¿Cuál
Dios? - se pregunta otro que va pasando en ese
Momento
y se detiene por la calle
¡Yo no
siento su felicidad ni la gloria de su presencia!
¡Yo no
percibo angustia o tan solo un respiro
suyo!
Yo no
veo que haga nada.
¡Para arreglar todos los males del mundo!
¡Se
supone del mundo que él mismo ha creado en la tierra!
¡Quizás Dios es tan solo un mito para vivir
con felicidad!
Si es
que la gloria de Dios existe
Esa gloria de que el hombre viva
A huevo y a como dé lugar un día
Creo que mejorarán las cosas
Aunque sea solo en mí dorado sueño
Todo podría cambiar algún día
Yo sigo soñando un mundo
De mayor convivencia humana
Aullido nocturno
La torre del tiempo uno y el universo
Mi
espacio sin medida es eterno
¿Cómo cabalgaría un rayo de luz?
¿Cómo haría del tiempo un tobogán?
¡Deslizándome a velocidades increíbles!
¡Esperando la mañana erguido el pecho!
¡Cantando llorando a moco tendido!
El himno nacional en una parada de bus
Perdido en una ciudad de electrónicas
Torres
punzantes y rascacielos
De tenebrosos vértigos
Y en las
amuralladas tardes
Sigue siendo la verdad a la
historia
Los pueblos no mueren todos los días
Hemos llorado ensalzado
A nuestros héroes y mártires
¿Qué es lo que sucede?
Nadie sabe de nada
Yo solo sabemos que no se sabe nada
Pero todo se sabe sin saber mucho
Labios sin nombre de pesadillas los horrores
Y a sabiendas hay un canto de libertad
Siempre
brota el alma de un pueblo
Que no supo callar las injusticias
Que ni supo agachar la cabeza
Se vino la muerte que anda a tientas
Cada mañana te miraba pueblo
Y hoy te
sigo tan distante
Mi grito
es fuerte a tu favor
Y un
abismo oscuro de aullido nocturno
Nos vamos quedando solos, solos
A ocupar el
sitio que fuera de todos
¡De mi patio al cielo no hay más que un paso!
¡Cabalgaría
este rayo de luz
En mi galopante corcel!
¡Como un torbellino del viento!
¿Haría y vería brillar más las estrellas a lo
lejos?
Eterno el tiempo a mis huellas gravadas
Soy esa sombra y el caminante perdido
Polvo somos espacio sin medida
Nadie
puede callar roncan las auroras
Gritan sus odios las paredes del miedo
Así como ayer gritaron los muros las consignas
Se quedan ciegos sordos de miedo
Lloran
las flores del mal tiempo
¿Podría la situación un día cambiar?
¡Dios qué te pasa! Vamos a pulmón tendido
¡Aullando contra lobos mayores!
Que nos quieren comer vivos
O borrar
de la tierra quizás
¡Que prodigiosa es mi blasfemia
Contra todas las maldades de este mundo!
¡Oh
noche de fúnebres paisajes y cantos!
¡Oh Dios
tan solo pispilea un ojo!
Expatriado
de tu geografía
Todo el
círculo de país pequeño
Que se queda quieto
Lya Ayala
Mi país a la distancia de miles de kilómetros
Tierra de esmeraldas corazón de América
Vivo en esta inmensidad de territorio
Tierra de esmeraldas corazón de América
Vivo en esta inmensidad de territorio
Por
curiosidad cuántas miles de veces me pregunto
Cabrían
los 21 mil kms cuadrados de mi tierra
En
esta inmensidad de territorio
Florido
de frescuras en colores
Y de
hielos invernales en que vivo
¡País mío tú de tan diminuto encanto!
¡Pequeña castañuela de amor!
¡País mío tú de tan diminuto encanto!
¡Pequeña castañuela de amor!
Abrigado por el puño de mi mano
Pero es que no encuentro serenidad
Un día cualquiera en cuanto tus peligros
Puedes morirte de muerte muerte
De nostalgias pero es hermoso mi país
Tierra prometida de ensueños y quebrantos
Diminuto garbanzo semillita de mostaza
Luna llena resplandece en el horizonte
A lo lejos mi país de codiciosos amos
Con su pequeñez de mar y lágrima
Imagen de dolor mi gente sencilla
Mi pueblo reguero de hormigas laboriosas
Que llevo a flor de piel herida tantas veces
Estremecido en mi palabra
Temblor eterno temple de roca
Transido por la magnitud de tus tragedias
Hemos de muchos muertos
Pero es que no encuentro serenidad
Un día cualquiera en cuanto tus peligros
Puedes morirte de muerte muerte
De nostalgias pero es hermoso mi país
Tierra prometida de ensueños y quebrantos
Diminuto garbanzo semillita de mostaza
Luna llena resplandece en el horizonte
A lo lejos mi país de codiciosos amos
Con su pequeñez de mar y lágrima
Imagen de dolor mi gente sencilla
Mi pueblo reguero de hormigas laboriosas
Que llevo a flor de piel herida tantas veces
Estremecido en mi palabra
Temblor eterno temple de roca
Transido por la magnitud de tus tragedias
Hemos de muchos muertos
Sembrado de cruces tú historia
Expatriado yo de tu geografía
Tu pura ausencia me mata
Vivo y sé que existes
Por hoy el sueño me bota
Expatriado yo de tu geografía
Tu pura ausencia me mata
Vivo y sé que existes
Por hoy el sueño me bota
Monologo
de la muerte y el espejo
Y no esperarte con
impaciencia
Llegará a platicar conmigo en
su momento crucial
Este triste espejo que no más
ayer se miraba
Pletórico de juventud único
tesoro de la vida
Más hoy circulan años y días
con la cicatriz
Que ha dejado la memoria del
tiempo
Que supura que no fuimos
capaces de vivir
La gloria que no supimos
alcanzar
La muerte misma nadie la
acepta de hecho
Aunque a la vida el mar de la
tiniebla aceche
Mi soledad es cada vez más
mía y tuya
Los recuerdos de una infancia
ganada
Que sabíamos blasfemar mi camada querida
Con la inocencia de matar
arañas peludas en el patio
Una casa llena de aire fresco
con huellas perdidas
De los padres que la
edificaron con el barro de su mano
De su honradez los sacrificios viven con nosotros
Esa madre abnegada que
derramó ternura
Inclinada sobre su lavadero
remojando su alma
Asoleando su frente. Hoy
entre la ancianidad
Casi se le parte el corazón
su ceguera miraba
Con la luz de sus ojos
tiernos
¡Oh Dios mío! ¡Dios mío!
¿Quién eres para disponer?
¡De la vida entre los cirios
que se apagan!
Ni aún el rostro escapa al
aire de la piedra que vuela
A la santa paciencia de
esperar
Entre las flores del bien y
no las flores del mal
Donde no sirve de nada el
dolor ni la alegría
Ante la majestuosidad de este
espejo
Hay un grito inesperado a
prolongar la noche
¡Oh Dios mío! ¡Dios mío!
¿Quién eres tú para dejar tu
canto?
¡Ven dispone de mi vida a
prolongar la muerte!
Oigo mi voz entre el pleno otoño
Y en el huequito de una
enramada
Un dulce pajarillo canta.
De lo
inesperado
Poesía y Ecología
Recobrarán dorado esplendor un día
En la eternidad de los instantes
Una muerte monstruosa a veces sin destino
Solo cenizas quedarán de la invisible palabra
Que fue tan solo
significado y sonido
Cenizas se respiraba en el vacío que flotaba
Tan solo cenizas quedarán de esta galaxia imaginaria
De los fuegos furtivos en millones de partículas atómicas
Quedan después de
la hecatombe
Solo lluvias de cenizas
De la nada existía la devastación
Y la muerte será siempre incalculable
Viene el desastre el mal tiempo la peste
Solo cenizas serán tu cuerpo diseminado
Entre la desnudez
de los suplicios
Sin una lagrima encendida
Dejas todo ahí no cabe más nada
Ni de todos tus gozos terrenales
Nada te llevas dejas tus memorias
Tienes que deshacerte de todo
Hasta que aguante la polilla
Ante la eternidad de los sueños
Solo la materia de lo que fuiste
Solo cenizas quedarán de esta devastación
Repentina de la otra Atlántida
Cenizas a la tierra a lo mejor
Mis cenizas al sumo de una fruta una flor
La hoja deja
caer su sombra inerte
Suspiro sobre el
lomo de las ramas quebradizas
Del miedo vernos
salvos del sueño del olvido
Despierta cada sol de la mañana
Cenizas de la tierra en siglos y edades
Del perecido
hombre que se oye
Que no sabe escuchar sus quejidos
Y en dolamas nucleares la martiriza
Por ello la tierra retumba y retumba
Desde sus bajos fondos deslumbra
Y retumba de maravillas y
misterios
Las mariposas vivirán en dibujos de los
niños
Un día este sol se apaga para siempre
O quizás más se encienda como braza
En los años luz del canto cósmico
Un día esta gota de agua
Costará el ojo de tu cara
La atmosfera envenenada
De uranios y mortíferos
gases
Experimentos de exterminio
de bombas nucleares
Las guerras que arrasan
campos y ciudades
Abriendo los agujeros
negros se traga en el ozono
Con lengüetazos de fuegos infernales
Se está doliendo la tierra
decantando sus llagas
La fauna en sus
dolamas se resquebraja supurante
Y en grandes oleadas de calor y deshielos
A golpes de olas se ahogarán los mares
La tierra derritiéndose cada instante
Inmisericordemente se despelleja se despluma
Entonces florezcan los enigmas eternos
De lo que inesperadamente está por llegar
Los cataclismos las
invasiones extraterrestres
El irnos a vivir a otros mundos convertidos en otra
especie
Todo es una posibilidad mental y no se apaga
¡Que sorprenda la
grotesca realidad de los horrores!
En la trágica muerte del hombre sin destino
Haz que recobre todos mis fuegos furtivos y apagados
De mis instantes
solo cenizas quedarán
De estas tantas galaxia imaginarias volando
De los fuegos en millones de partículas atómicas
Tienes que deshacerte de todo
De tus chips digitales librarte del registro
De los archivos perdidos o renovados
De los ojos que
vienen de mis ojos y de otros ojos
Que venimos por generaciones perdidas de otros ojos
Nada te llevas ni
tus cenizas que fueron
El brillante esplendor más grande de tu vida
Cenizas fue este amor que no se apaga nunca
Este amor por la humanidad entera
Cenizas de los que dividieron el mundo
Para la propiedad privada
Y ya miden en parcelas el
espacio sideral
Pero yo sigo soñando
sueños entre sueños
Un mundo mejor con armonía
social
Sin intereses creados ni
divididos
Sin fronteras ni muros de
concreto
Sin carnet de identidad ni
pasaportes
Sin cárceles sin reos criminales y penitenciarios
Soy humano demasiado
humano
Quedan los hechos
tus huellas
Hasta que aguante del tiempo la polilla
Ante la eternidad de los sueños mis pesadillas
¿Cuál destino depara a mi pueblo?
¿Será que la muerte llegará del cielo?
¿Quién sabe? ¿Hacia dónde vamos?
Queda solo mi palabra
Grabada en esta piedra
¡En esta lapida sin nombre!
Circunstancia I
Solo tú eres capaz de
inclinar la rocosa montaña
La tormenta de paso en cantos de sirena
los inviernos
Mis temporadas en el infierno vendrán a ti
Y erguirnos al sol verde radiante en tus rayos
Desde la tumba perdida y este
loco a solas habla
Mi cielo toca tu paraíso
terrenal tu limbo de ternura
¡Soy para ti! ¡Lúgubre sombra en el paramo de la noche!
Y el canto de tus abismos aterroriza mis palpitaciones
También entre luz y sombra las maras del mal
acechan
¡Y en una esquina la muerte
es desollada! ¡Porque duele!
Saber dar saber recibir
con agradecimiento para volver a dar
¡Contigo Oh poesía al
instante recobro la razón!
¡Desde cuándo eres tan
ciego! ¡Dios mío!
Para no interponer disponer o recobrar tu razón
A ojo divino de buen cubero para no aliviar
Las tantas quejan de este
mundo.
►Circunstancia II
Al
poeta José Roberto Cea
Con
hermandad existencial
Veo nubes negras en el
horizonte
¡Que molesta esta piedra en
mi zapato!
Estuve un poco enfermo en
estos días
Me dice en su misiva
Un joven poeta de mi tierra
Que ya de por si la vida
Es una enfermedad
De la que uno no se salva vivo
Pregunto por mis llaves
Enredadas en mis manos están
Libro que nunca encuentro
luego ando
En busca de otro que no
encuentro
Y encuentro el otro que ayer
buscaba
Un poema cuando ni pensaba en ello
Sucede que al momento lo encuentro
Si necesitas alguna cosa de
momento
No la encuentras y la
encuentras
Cuando no lo necesitas
¿Debo reír o llorar tan solo
son desencantos?
¡Amarguras de la vida misma!
Estoy con la cabeza en cualquier parte
Menos donde debe estar
Aquí estoy pero me encuentro
algo
Mi mente ¡existe! ¡Pues yo
existo!
Pero casi olvido
estoy por sacarme
Esta piedra que molesta en mi
zapato
Mejor darse cuenta de las cosas hacerlo broma
Soy el
grillito cantor entre la luz que ilumina
La oscuridad del tiempo.
►Los frutos de Narciso
Esta copa de vino refresca mi
cuerpo
Narciso soy al contemplar la fealdad de mi
belleza
Y morir en el fondo de las
aguas
El poeta Lipo quiso la luna alcanzar reflejada
En el fondo de la fuente que le trago la muerte
Tufu que escribía hasta en
las hojas de loto y de plátanos
¿Vendrán las diosas del
bosque?
¿A beber mis lágrimas
saladas?
Hay una misteriosa energía en
mí
Hablo de la soledad de la alegría
Mis ojos de caballo cierran
espantos
Me extraño de mis propios
pensamientos
Provocan sensación de rabia
de miedos
Es la hora en que toda la
ciudad duerme
Y en sus rincones oscuros
asalta la muerte
De niño soñaba en recorrer el
mundo en alfombra mágica
Y no pensaba en Dios ni en el
pecado mortal del hombre
Yo solo quería viajar como
pájaro del dulce encanto volar
Ellos nunca se quedan vuelven
a morir
Pero andar haciendo caminos
luego regresa
Y caigo en una inerte y
meditación profunda
Y miro el cielo y me
despierto a gritos a media noche
Se conoce la ciudad se mitiga
el hambre
Vomitando su malabarismo de
aros y fuegos
Alguien capaz de olvidar esta
tristeza que es de todos
Y comienzo a escribir en la
arena mi camino
Todo el universo que conspira
en mí y en todos
Cierro los ojos y veo que
todo acaba en el horror.
¡Si muriera mañana!
Si la muerte viniera…
Y que me haga una espera.
Miguel Hueso Mixco.
Si
por casualidad muriera mañana
Quizás
este mismo instante
Que
escribo este poema
No
llevo no dejo nada
Ni
petate donde caer muerto dejo
Ni
dejo seguros de vida
Ni
cuentas bancarias en dólares
No
dejo herencias de familia
No
llevo cargos de conciencia
Dejo
mis títulos académicos
Libre
estoy de pecados concebidos
Libre
de pecados mortales
Que
bañan de maldad el alma
Nunca
mate a nadie más bien
Librados
yo y mi familia
De ser
matado a escondidas
Por los
que sembraban el terror
Si
muriera mañana lejos
Mis
huesos reclaman mi tierra
Mis
cenizas echadas al viento
La
voz desaparece la palabra queda
Vida
que aprendiste a enfrentar
El
poeta jamás deja la página en blanco
Ni lleva la gloria que un día soñó
No
todo sueño ha sido soñado
Soy
el espejo roto de mis sueños
Al
fin siempre fui un soñador
Deja
su sonrisa su huella en el tiempo
Deja
sus besos y las novias que recuerda
Y a
su amada que tanto ama por siempre
Que
sirvan a otros sus queridos libros las fotos
Sus
zapatos viejos su bufanda que su madre
Confeccionó
un día con su hilo de crosshet por las tardes
La
sangre en sus hijos generando vida
Deja
sus poemas medio cojos a quienes mis
vinos beban
Eres
esa lucecita de siempre que supo alumbrar
Como
un candilito mechita de trapo y gas
Que
desparrama pocitos de luz
De
su gran sabia humanidad
A alta
hora de la noche
Miro la calle desde la ventana
A media sombra de la noche
Oyes allá lejos
llanto de niño
Todo es blanco con la nieve
La tormenta cubrió
las ventanas
Prados aceras en London
Mientras en mi país todo es verde
El vecino de enfrente ha encendido la luz
Le pareció golpeaban a su puerta
Aquí llueve nieve
con estruendos
Tornados huracanes arrasando vidas
A 35 grados bajo
cero de puro hielo
En mi país siendo Mayo posible
Haya un hermoso ramo de sol radiante
De flores rosadas se encuentre lloviendo
A cantaros en truenos centellas y tempestades
Y la lluvia recorra los montículos
Las calles
empedradas en correntadas
Como ríos enfurecidos buscando su cauce
Por las orillas del pueblo
Para entonces jugábamos en los ríos
Los barquitos de papel trazados con maestría
No puedo dormir cuento las horas
Mi
mujer duerme plácidamente a ronquido profundo
Acostumbrada a sus aspirinas y taylenoles
A su
dolor de cabeza que la postra de repente
Mientras
escribo oigo latir la soledad del viento
Que
resopla contra los quicios de las
puertas que crujen
Los grillos vibran bajo mis
pies
Todos en un solo nudo unidos de manos y de conciencia
Mi
madre Margarita es toda luz de amor encendido
Que
no se apaga nunca no se aparta de la ventana
Y su
ceguera encantada anda en la luz
Pensando
en los hijos sus tormentos
Es
que las mamas de uno
A
solas entre labios platican
(Yo he visto a mamá hablar con Dios a solas)
Mientras
yo entre los querubines y demonios
Deambula
mi espíritu entre acechos
Mi
país llora sangre que gotea todo el tiempo
Y
donde la injusticia anda de rondas por las calles.
Tesis de
mi sombra que vaga
Mientras camino por la
Avenida Rubén Darío
Mi sombra se borra al umbral
de la luz
La poesía es oficio del
hombre para el hombre
Y aquí en mi tierra la poesía
llevó a la muerte
A poetas y profetas. Y otros padecieron
Las mazmorras de la cárcel
Torturados fueron por los
esbirros
Masacrados desaparecidos
Murieron por la injusticia
que combatieron
No soñaron sus triunfos ni sus glorias del
Olimpo
Cantamos himnos por el bien de la humanidad
¡Salud mis poetas muertos de mi tierra!
Dignos de elogios y laureles
sean mis poetas muertos
Merecedores de una
Oda de Píndaro o de Neruda
Hay cosas absurdas increíbles
cosas que pasan
El dolor ciega los ojos murmura
Mi silueta y mi sombra andan
por extraños rumbos
Deambulo mi ojo abierto en
paisaje triste de otoño
Y otros vienen berriando y
berriando estamos
Soñando sueños de irse al norte a vivir su sueno
Mucho miedo me da cuando
hojeo los diarios
Las noticias del mundo me asombran
Y en mi patria me estremecen
Y es que son tan fantásticas
las noticias cada día
Y los periódicos amarillistas
opinan porquerías
La corrupción es el pecado
fácil de los poderosos
El consumismo en colores
hasta las narices
Ya luego entra el sol
y la sombra me persigue
Y camino sin rumbo por esta avenida
Es un San Salvador hormiguero
que va y viene
Esquivando las maras y el crimen voy de camino
Ojo al Cristo un monumento a
mis poetas mártires imagino
Y a todos los caídos que se
fueron a la lucha
Me voy rio de gente abajo me
hago el loco el maje y oigo
“Hay viene la cuilia”, como
decimos por aquí en mi tierra
Haciéndome el pendejo riéndome yo de mi mismo
Fantasma soy perdiéndome
entre la multitud.
Mudanza
Pensando en moverme de sitio
Estoy a la espera de
volvernos un día
Soy el que espera el correo
de la tarde
Que viene de lejos allá del
mar del sur
Ayer recibí carta del
“Pichón” Cea
El poeta habla de la
esperanza
De un pueblo que lucha por vivir
Un pueblo que se niega a
morir
Tenemos esa historia triste
Trágica heroica valiente
Estoica como pueblo
Dolor de país distante que se
vive
¡Oh navegante rio que me
siento arremetido!
¡Manejando mi velamen en el
horizonte!
Mientras sopla el viento
sobre las olas
Y las olas nacen violentas
con el mar
Estoy pensando en mi soñado
patio
Extrañando lagos y
lagunas ya secando
Y sus montañas ya se
descuajan
En negocios ilícitos la mafia
y el poder
Sus volcanes de cenizas
apagados
Ese dolor del país sueño
distante que vivo
La sorpresa de la insólita noticia
Persistimos somos incitadores
insubordinados
Aunque sea trabajo de
hormiguita
Me estoy moviendo de sitio
En esta monstruosa ciudad
Rompiendo rascacielos entre
rascacielos colgantes
Que me ciegan los ojos sus
luces de colores
Como decía mi hermano Alfonso
Hernández
El poeta que cayó en la lucha
Pero es este sueño de ir
siempre y hay vamos
Labrando un futuro luminoso
RITUAL DEL AMOR
Amor
clandestino
Tus senos como pequeños frutos ácidos
Hoy creo en la posibilidad de amarte así clandestinamente.
Alfonso Hernández
La más graciosa la más hermosa muchacha
Del pueblo se citó conmigo a escondidas
Luego muy radiante está por
llegar
Por el sendero
del bosque
Allá bien adentro del cerrito
A la orilla del viento
¡Llueve! ¡Estoy solo alegre!
Y no me aburro de esperarte
La brisa que suspira la paciencia que babea
Y la juventud de aquellos días
Pasa juntito a mi te oigo
entre la huerta
Por la vereda aquella te sigo en mil gestos
Las horas meditando a solas
Esperando a que llegues a mí
¡Como aroma de bálsamo!
Soy el viento irá de pronto ansioso
Buscando la colina de tus azules piernas
Añorando tus pechos florecidos
Con sabor a frescas uvas
Hechas madurar debajo de los bosques
¡Oh yo te abrazaría!
¡Toditos tus rincones tocaría!
Me tumbas de fuerza hacia tus senos
Encabritados caballos en el campo
En la ceguedad de la noche acariciare
Mamando tu soledad de macho cabrío
Apretándote mientras mancho
Y estrujo tu frondoso cuerpo moreno
De poros tan calientes tan ardientes
Hasta quedar tranquilos
Cual otro manso rio irriga satisfecho
Tus piedras y ramajes
La estación que nos acoge
Mozuelos aspirando sus cuerpos
Te espero. Siento frio ¡Hundido en ti!
¡Al fin se puso el sol!
¡Y asaltó de luz tu cuerpo
Espejo
roto en sus detalles
En esta tarde esposa mía
Ausente de mis lamentos
Las agujas giran al revés
Correr el tiempo quisiera
Que sean las doce de la noche
Las seis de la tarde mi locura de Quijote
Respiro suspiro encojo mis rodillas
En moderados movimientos
Mi perrito juega
interrumpo el instante
Me rasca los pies sacude su cola
Me huele suave lame mi cuerpo
Luego salir a orinar la noche
Su compañía me persigue a todas partes
Pero sigo lamentando tu ausencia
Miro el reloj son las siete
Oigo el estridular de un grillo
Podrías de repente aparecer por hay
Hostigar lanzar diatribas infernales
Y encerrarte con llaves y candados
Al capricho de antojos y encantos
El abrazo fuerte de tus calores fríos
Tú con el silencio de mis ojos
Tu espacio sin medida cuando viene
Esposa mía ya la madrugada viene
Cayendo respiro en tu vacío mí suspiro.
¡Eres un asalto al cielo!
En ti se acaba mi neurosis
En
tu cuerpo recobro mi principio
José Roberto Cea
¡Eres un asalto al cielo!
¡Una fuerza de unidad!
¡De lucha! ¡De llanto! ¡De guerra!
¡Eres un himno a la alegría!
Para triunfo del sueño
Sol de mañana
Aurora de tierno encuentro
Trinchera de luna y viento
¡Eres perpetuo movimiento!
Y somos capaces de recordar
Sembrar un hijo
Como árbol como piedra
¡Oh noche asomas!
¡Un fantasma que llora!
Niño del vecino que murió
Sin una gota de leche
Junto a la lejana
Tristeza del perro
Que en el patio aúlla
Quizás sin su hueso de
mañana
Somos jadeantes sombras de la noche
Sombras que al paso
Se escuchan calladas inmóviles
En la soledad de los portales
Eres amor que espera la belleza
La libertad de arder
En mis lozanos huesos
Eres amor que espera la palabra
Aquí contigo se recobra el misterio
Aquí me aprietas
Deshaciendo el instante
Bajo esta sencillez de
amarnos
De encontrarnos ardiendo en el lecho
Una manera de nacer luego de
morir
Contigo se oscurece la luz
Y penetrando esta tierra me voy a fondo
El paraíso encantado de tus escombros
Es que tú eres la razón de mi canto
¡Sin furia apaciguada!
Aunque despiertes dormida
Sentirás mi rugido de
jaguar sediento
Con agilidad de tigre
alcanzaría
Tu mirada que me apacigua
el llanto
Soy la gran lengua busco
tu aliento
De eléctricas caderas
temblando
Estaba escrito
bebería tu saliva con amargura
Bajo infinita ternura
¡Oh corazón de cristal!
Revientan luceros tus
labios
Lucen flores silvestres
tus sienes
Sacrificaremos vida pasión
y llanto
En los sagrados ritos del
pasado
Vivimos en el mundo
Una dura época de la
historia
La naturaleza arrasándolo
todo
Cientos de muerte con
furia apaciguada
Y el imperio que ametralla
arrasa campos y ciudades
Ave de rapiña y
ventosa de globalización
Quieres absorber con tus
dominios
Olvidar los días difíciles
Vienen devorando vidas los
misiles
Ancianos y niños y pueblos
Una rosa de pronto lame su miel
Libando de encantos veo tu piel
Mientras brillante tu
rostro
¡Cosita chula cachimbona
que sos!
¡Cabes en mi fondo así
cabal!
Justo a la medida
Florecen los tulipanes
ahora
¿Quién me puede curar?
¡Este mal de las ganas de
estar contigo!
Somos una sombra buscando la luz
¡Cosita chula que sos!
Como decía Pedro Infante
¡Mujer que me paras el
pecho!
Corazones
pecan en secreto
Echada en un Rincón de este
ancho patio
Una vaca muca adormitada
mastica la tarde
Al bullicio de las urracas
revolotean en el naranjo
Al momento caen dos gotas de
sangre
Y la tarde que pronto se
muere
A los vientos helados que
vienen silbando
Aquí yo en este patio en esta
casa vieja
Cuando yo era niño y después
parecido joven mozo
Prendido a los ojos de
aquella muchacha en flor
Ya la noche viene abriéndose
como una sombrilla
Mi paciencia se encuentra hoy
apacible
Amo mi caballo que corría tan
veloz rumbo al monte
Como un huracán con bríos
relucientes
Y hay rumores de lluvia en
nubes negras
El hombre y la mujer dejaron
la ciudad
Por la mañana a los primeros
rayos del sol
Salieron rumbo al norte para
no regresar nunca
Se perdieron para siempre
Salieron como huyendo de este
infierno
Salieron desesperados quizás
con esperanza
A como les tocara buscaron su
sueño americano
A la hora en que el sol se
tapa con el dedo
De la muerte su propia sombra
ciega de luz
Tengo una extraña pereza muy
intranquila
Por ahora aquella linda
mocita camina
Y a la luz de la luna a
escondidas llega
Ahora somos tú y yo en esta
cuita de amor
Y yo luego de desmontar mi
corcel esperaba.
¡Oh Dios mío se muere la
tarde!
Y que me importa a mí si voy
al infierno o al cielo
Esto es solo temporal y
mejoren las cosas
¡Santo Dios! ¡Y no porque sea
un milagro tuyo!
Lo que nadie recuerda…vive
Esta lluvia este viento que
golpea mis ojos
Lo que amamos nunca se acaba
Viejas fotografías que
todavía
No he tenido tiempo de
contemplar
He llegado a casa desde una
larga ausencia
Y al abrir la puerta los días
vuelven cantando como ayer
Y al eco de mis pasos he
sentido un chirrido mohoso
De gavetas y armarios
apolillados llenos de cosas viejas
Que me hablan y ya no están
las cosas en su mismo sitio
Hay polvo herrumbre de
soledad en los pasillos
¿Y de qué sirve este huérfano silencio?
Que encuentro en el rincón
más querido de la sala
(Donde solía leer a Salarrue)
Solo aquel recuerdo de padres y hermanos
Que se llevan en la sangre
vuelve hoy a mí ser de niño
Es lo único que vive en esta
oración de música lejana
Siempre una ausencia me
persigue y no la encuentro
Un ladrido de perro amado
husmea la tarde
Como esa sal en la lumbre de
los sueños
¡Oh Dios mío qué no te
encuentro!
Hay en esta casa un instante
de alma vacía en mí
Que sale a recibirme.
CONVERSACIÓN CON FANTASMAS
Elegía
para alcanzar la primavera
Somos capaces de reír o de cantar
Aquí en mi tierra hasta las
piedras lloran
Y entonan su lamento de
esperanzas
Somos bebedores de lágrimas
de frutos amargos
Entre las noches tenebrosas del
sueño
Los ciegos andan a la luz de
sus angustias
El párvulo frio de la música
de los que pasan
Sudando la gota gorda de sus
miserias explotadas
La vasija de la historia
desangra su pasado
Doloroso siento el quejido
que se cuela
Y en el ánfora mágica del
tiempo la alfarera
Clama los encantos perdidos
de esa historia
Hemos aprendido con
estoicismo las tragedias
Para enfrentar los mismos horrores de ella
Hemos aprendido la bravura de
las olas
Mar que día a día agitase
cada vez más
Somos capaces de alcanzar la
primavera
Somos capaces de ir escalando
a valentía calada
Los peldaños de esa historia
que llora sangre
La estocada del asalto en una
esquina
El caos social ungido por la muerte
¡Empiezas a desconfiar de tu
misma fe!
El crimen organizado de las
maras
Salir a la calle da miedo en
esta tierra
¿Y entonces dónde está Dios
que no hace nada?
¡Ojala Dante encuentre a los
malvados!
¡Penando en el fuego de sus
infiernos!
Regreso
al lugar natal
Esta
batalla te la debo
Esta batalla de vivir
Llegando al mismo sitio
Como el escarabajo.
Alfonso Quijada Urías
No soy el eterno
extranjero
En mi propia casa de
infancia
Llena de recuerdos sombríos
Solo quedan sus resplandores
Casa derruida aguardando
despojos
Abandonada por el orín
del tiempo
Mapas de moho en las paredes
Ocho ombligos enterrados en
el patio
Bailando su son de niños locos
Aun ni el agua que corre
Torna hacia su manantial
Todo llega a un final eterno
La vida de los hombres se
pierde
Como dejan huellas las aguas
de los ríos
Que pasan a perderse en el
mar
El tiempo consume el
tiempo come
Devora las entrañas de la
vida y el misterio
Deja huellas corroe
cicatrices
Heridas profundas que duelen mucho
Pero hay más tiempo que vida
Lo que no tenemos es mucha
vida
Para vivir todo el
tiempo
que quisiéramos vivir
Aunque lejos sentirnos cerca
¡Y de veras que duele su
ausencia!
En todo caso salir un día
De la patria que se ama
Es regresar de nuevo
Como el escarabajo regresa a
su mismo hoyito.
No es
tormento la muerte
Existe la poesía la vida
Canto y poesía música y palabra
El verbo la creación misma de las
cosas
El principio y un final de la noche a la mañana
Nada es eterno estático todo
cambia
Hay que dar gracias a Dios ¿Si es
que existe?
¡Aunque yo no siento su presencia!
¡Blasfema la gente por todo!
(Hasta del gobierno y del vecino)
Basta de miedos busca el instante
No podría vivir sin ti quería verte
Llevarte esta tarde a la huerta
Mira la vida tiene sus encantos
¿No sé por qué impresiones?
¿Hablo de muerte en estos días?
No pueden conmigo los diablos del
mal
No la presiento no me voy todavía
Pues es natural inevitable miras
rechoncho
Como un cerezo florecido
Nunca me sentí mejor en la vida
EL mal zacate no se quema
Viejos son los caminos decía Beto Zetino
“Patarisca” caminaba como Chaplin
Y gato con botas de policía
municipal
Hay una grieta al asombro
del túnel
Escoja su momento para venir a
traerme
A los abismos del olvido a la
otra vida
¿Si es que la hay? Uno no sabe
nada
Recibir premios o sentencias es
la consigna
Unos tienen tanto miedo a vivir que no viven
Otros tienen miedo a morir
que hablando se mueren
Así de muerte de natural manera
de repente
Un día cualquiera unos tienen
miedo tenebroso
Otros ríen a carcajada cruda
Del qué dirán los otros luego ahí
se quedaron
Otros por sus ideales no temen morir
Mueren luchan cantando y cantando
Como las chicharras de Semana
Santa
Y
de todos sus males espantando
Abrazados a esta locura
desesperada de morimos
Sin enterarnos de nada
Miedos a no alcanzar los triunfos
Porque los triunfos se derivan de
las luchas
Miedo a soñar miedos en el sueño
A soñar despiertos vayámonos a
soñar
A manos llenas para todos los
justos
¡Qué cosas verdad! ¡No debemos enfadarnos!
No me importa lo que ocurra.
¡Bueno sí me importa!
Pues la vida tiene inesperadas
sorpresas
Bien las tragedias dolorosas los
horrores
Lo que sea debemos enfrentarlo
Un viaje de mil leguas en camino a mi patria
Empieza con un paso desde el
corazón
Viviendo bajo el Dios Baco hay
momentos
Me decía mi abuelito “Manuel”
Ya luego hablamos y no te
preocupes compañero
No habría mejor manera de morir
Todo extinguiendo la vida no es
eterna
Cambiando desde el pasado
infinito
A los mitos inciertos regresamos
De la otra vida el día del juicio
final
En que muchos cristianos errantes
Con sus muchos muertos se
levanten
Del olvido del sueño eterno se
levanten
Juntarnos los seres queridos de siempre
Se murió se murió hay que vencer
al miedo
Para vencer a la muerte
¡Y si la vida es sueño
intensamente!
¿Por qué esposa mía por qué
desesperarnos?
¡Junto al ciego amor de morir
contigo!
Situaciones
La lluvia se calmó toda
serena
Para contemplarla desde la
ventana
Esta locura de hablar a solas
Alguien vive llegan aquí
llorando
Con apego a sus escrituras
llegan tocando puertas
Pero alguien llega riendo y
se marcha riendo
Desde esta ciudad muy lejos
de mi patria
Solo tenía un ojo y una mano
para ti
Y veo mi sombra al amanecer
en soledad
Pero al medio día vuelvo a
mirar tu sombra
Mujer mía me llevas a la
orilla de tu alma
Y tus encantos matan despellejas los oídos
Mi recuerdo corre en el
corazón natal
Una fuente de agua fresca
llena de Diosas y ninfas
Pasabas te contemplaba
flotando de gracia y tímida
Eras para mí la flor más bella entre todas
Y lejos vine a beber las
aguas de tu fuente
Aquella mañana de mayo
acariciando tus trenzas
Me volví loco también y vi reflejar
Mi imagen en la pupila de tus
ojos
Deslizándose entre vaivenes y
vaivenes
Hamaca meciéndose al empuje
del ventarrón
Hay resplandor y mira mujer
caen las hojas de otoño
Arrastradas por el viento de las
tardes
Cual mariposas amarillas en
bandada silvestre
Para dibujar las hojas por los suelos en alfombras
¡Crudo!… dicen ¡vendrá este
invierno!…
Y saber esperarlo y uno
aprende a vivirlo
Como siempre verlo sentirlo
tal cual como es
Yo sigo añorando tus encantos
invernales
Que me das miedo estas como
los diablos
Eso es cierto. ¿No sé? ¡Tú
desesperas!
Con razón maldices la estupidez de los hombres
¡Oh Dios qué pasa contigo
endereza el camino!
Mi Diosa cotidiana
Creo en la poesía mi Diosa cotidiana.
Roque Dalton
En todo caso las palabras me llevan de la mano
Me llevan al infierno al paraíso de mis utopías y ensueños
A los recónditos faroles de imaginación y fantasías
No tengo el dominio de las
palabras
Ante la magia que contienen
Es la poesía la esencia del
verbo el principio
Que esperaba despertarse en
sus hechizos
De todos los instantes el
padecimiento
El hombre la sociedad la vida
misma
La poesía mi Diosa mi
religión que canta
Se baila se llora se ama se
juega la vida
Llegamos a la revolución por amor a la poesía
Y por conciencia de clase en
todo caso
Por esta veneración a la poesía llegamos a la
revolución
El poeta alquimia de las
palabras
Entre poetas magos y profetas
Hay una hermandad afín en la
lucha por la justicia
En todo caso el
compromiso es la poesía
Fieles a ella voz integrada a
su lenguaje total
Es palabra Gillette de doble
filo la poesía
Contra la desigualdad la
opresión
Por la libertad defienda el
miedo y la felicidad
¡Pendenciera tahúr y jugadora del azar por las
noches!
¡Rastreadora de todo mal amén!
¡De la falsa modernidad de
los espejos
Los poderosos del consumismo y del dólar
Poeta organillero ayer
guerrillero
¡Caramba! ¡No te quejes!
Los poetas no sirven para nada
Solo para soñar en sus Olimpo
Aun así los poetas son la honra de su
tierra
El coraje de entregar la vida los poetas
De muertes gloriosas los poetas
¡Cómo
te extraño! ¡Oh poesía nunca puedo!
¡Jamás!
¡Jamás! Como dice la canción
¡Y
no puedo echarte de menos! ¡Oh poesía!
¡Aunque
no llegue a mi bolsillo!
¡Un tan sólo
centavo con tu oficio...!
¡A lo Quijote!
Te levantas suave brisa de
calor
La frustración se vence es
tu mente
Por la mañana una limonada
caliente
Limpia las garrasperas del
corazón
Así decía mi abuelita
Chabela adobando
Las especies mientras el
batidor de café
Borbollaba de alegría
entre las brazas
Al gran fogón de la cocina
un fuerte viento
A las meras cinco de la
mañana
Cantando gallos y gallinas en el patio
Oyendo al vecino de
enfrente
Que golpea cantaros y
guacales
Oyendo tempranito por la
radio
Las canciones de Pedro
Infante
Mi vecino don Nando
“Hojalatero”
Llegan los perritos meneando la cola
¡Manos de todo el día
hacían suave los instantes!
Era otra época. Me alejo
de los libros
Y algunos no los entendía
puro gato husmeaba
Nudo
atorado en la garganta piedra soy
Pájaro del dulce encanto
como don Quijote
Chiflando todo loco y eso
si que no me compren
Que no me programen
En sus agendas plagadas de
maldad
No te hagan pensar con el estomago
Ya te gravan en archivos
electrónicos
Ya registran tu número de
identidad
Ser bondadoso a veces por
algo
Pues no se debe ser tonto por bondad
A solas enjugo mis
lágrimas de cocodrilo
No bajo el espíritu ni la
guardia
Estoy águila de todo
instante que retumbe
No soy astuta víbora ni
suspicaz ave rapaz
Soy esa sagacidad de jaguar
Rompiendo como la flecha
el aire
La valentía se mide con la
razón del corazón
Sal a combatir los molinos
de la injusticia
¡Ármate Caballero en estos tiempos!
Cabalgando la razón de la
sin razón
Mi bella “Dulcinea” de
amor desenfrenado
A la retaguardia en su burro la razón
Sancho fiel escudero
fantasía soñolienta
¡Ármate! ¡A como puedas en estos tiempos!
En que vienen a tirarnos
tantas piedras
Pienso que un día sea muy
alegre mi patria
¡Forjada con sangre de
dolorosa historia!
¡Mi patria siempre ha sido
triste muy triste!
¡Oh noche desparramada de estrellas vienes!
Hijo soy de una patria que
amo que vivo
Mi Rocinante de piedra relincha airoso
¡Y no sabemos en sueño todo futuro!
¿Qué nos espera? ¿En qué vamos a deparar?
¿Cuál es el destino de nuestro pueblo?
¡Todos que encontremos un mundo feliz!
Eso es navegar echar a volar la imaginación
Y montar
los caballos oscuros del cosmos
Y el hombre entre los
trescientos millones
De estrellas de la vía láctea
granito del universo
Y de los invisibles fantasmas
del ojo humano
Incapaces de comprender los monstruos
Este agujero negro trae caos
e incertidumbre.
Pero
los molinos de vientos tan violentos
¡Se debaten en actos y miedos tenebrosos!
¿Qué camino nos queda a la
humanidad?
¡Santo Cielo! ¿Dios? ¿Por qué no hace nada?
¿Contra el malvado poder
de la tierra?
Huracán
Al dolor de mis hermanos
Siento vergüenza de mi mismo
Viviendo como dicen en el mejor país del mundo
Casa de confortable calefacción
(Echando la gota gorda por vivir)
Junto a mi buen vino sin hambre sin sed
Y allá lejos en mi patria ausente
Los más pobres sufren a su intemperie
Sin un techo sin un pedazo de pan
Ni pocitos de café con leche
Ni camas ni frazadas quizás
Abrigando a sus niños
Quiero darles una mano
Mi corazón mi casa
Ellos batallando contra las injusticias sociales
Las inundaciones entre los escombros de las piedras
Entre escabrosas lavas de volcanes apagados
Entre ventarrones silbando aterradores
Entre terremotos soterrando vidas edificios
Y todas las queridas cositas que pone amor
Contra los ciclones del mal tiempo
Los huracanes de los océanos bravíos
Golpeándolos de muerte dolorosa
¿Por qué la naturaleza es
injusta con el hombre?
¿Por qué el hombre es injusto con la naturaleza?
Al destruirla a mansalva de sus oficios e intereses
(Ya no será posible un día la vida en la tierra)
Como fuertes correntadas de caballos desbocados
En galope arrastrando todo a su paso enfurecidos
Lo que a su paso encuentran soterrando vidas
Entre lodos barrosos allá entre arrabales en desahucio
Las marginales chozas oscuras que sostienen techos de cartón
Y ni las mansiones de los explotadores
Defensores de sus arcas doradas
Que quitan el pan de la humilde mesa
Que pesan en balanza el sudor
expoliado de los pobres
Que roban la belleza del
paisaje
Que venden nuestro país al
mejor impostor del imperio
Destruyen por ambición hasta el medio ambiente
Amalgamando ganancias a sus
bancos financieros
Ni ellos mismos se salvarían a su corrupción de pecado fácil
Ante los embates de la naturaleza misma
Ante los flagelos de los torrenciales diluvios
Que vienen empantanando todo hasta el alma
¡¡Pero resurgiremos!! ¡Fortaleza pueblo mío!
No perder la calma la esperanza que se haga vibrar
Después de tan crueles tormentas
¡Siempre habrán soleados atardeceres!
¿Por dónde te has
metido Dios mío?
Quiero contemplar la nueva primavera
¡Tan solo mueve un dedo!
LAS ARENAS DEL TIEMPO
El
caminante y su sombra
Si fuera un sueño te lo diría
en el aire de tus ensueños
Si fuera una lagrima anidaría
en tus imaginarios ojos
Y si fuera un jazmín pendería
en tus radiantes sienes
Y como una abeja zumbaría
amoroso tus mieles
De vientre maduro
perdura la calle corroe mi alma
Aunque andar en zancadas de miedo a salto de mata
Andar en todas partes
emprendí el camino entonces
En un instante de mi mismo perplejo
Un cerco de izotes divide los linderos
Veo que ya está atardeciendo
Pienso en mi delicada flor mi
gran amor
Con la que moriré a pesar de
sus martirios
Que desespera las tantas
veces desespera
Que desparrama violentos
pétalos al viento
Cuando así se “encachimba”
tan dulce y de encantos
Entonces me fui a fondo así
como llegué
Para besar sus canelos ojos
en la oscuridad
Vagabundo soy de mi propia
tierra y mis ausencias
Toby o Príncipe
mis perritos mimados
Me enternecían con su bondad
a recibirme
Y aquel babea su hambre callejera
Yo pájaro en camuflaje de
colores
Cuando va llegando la noche
Vigilada en sus quehaceres la
ciudad
A solas en medio de la
multitud
Y admito que estoy perdido en
sus rincones
El sol brama fuego
de angustiados rostros
Soy ese pájaro no termina
de volar
Vagabundeo la ciudad estoy perdido
No es la misma ciudad de
ayer está cambiada
Vine con palabras sin
pelos en la lengua
Y también entre mis locuras
maravillosas
Traigo un tanate de alegrías
y de esperanza
El tiempo deja su marca su
huella y sus glorias
Si pudiera soñar lo soñado en
el sueño de morir contigo mujer
Si no se habla la saliva se
coagula de lamentos
La sombra
y el caminante sus pesares me persiguen
A la luz del sol viene el cielo ungido de tormentas
Y me veo aquí en San Salvador
medio atolondrado
Acompañado de mi sombra
perdido de ardiente sol
Bucéfalo que se asustaba con su propia sombra
Deambular mis asombros entre
la multitud agitada
Estoy pensando apetecido esta
cerveza fría
Con churrasquito de cerdito
de boca y ejotes frescos
Con su mayonesa de ajo y el
chilito picado
Y cebollitas curtidas en
vinagre de manzana
Entre la familiaridad de los
instantes
Libando mi tristeza ya para
pronto atardecer
Y ya nos vamos así como hemos
venido llegando
Para estar pronto en el
regreso
Oigo en mi tierra un aullido profundo y lejano
Cuando la muerte viene al acecho.
Hora de circunstancias atroces
Hace algunos días he dejado el lápiz
Una página en blanco reclama
La palabra plasma sonidos y significados
La lluvia deja de caer
Las plantaciones en sequia
Todo se volvió árido la frescura misma
Sin posibilidad mental
Vino el acaparamiento
Los comerciantes sin escrúpulos
Juegan al hambre de los pobres
Pagan el pato de las desesperanzas
Los bacanales desenfrenados
Entre el bello paisaje de las cosas
Todo aquí es violento
Desde el tráfico mismo agresivo
Echándose a la fuga
Cuando atropellan a un pobre cristiano
Hora de sobrevivencias infernales
Al caminar por estas calles ¡cuidado!
Alguien sin hígados a mansalva mata
De repente parado entre la gente
Pistola arma cortante en mano
Se paralizan tus nervios
Todo está al parecer deshumanizado
La vida misma no tiene respeto digno aquí
Ni precio asegurado del crimen organizado
La ansiedad y el miedo caminan con la gente
La desconfianza entre unos y otros
Y las extorsiones a la orden del día
El stress el consumismo de las transnacionales
Hay explotación y saqueo
La maquinaria humana
Los ambulantes perros muy hambrientos
Conducen a la ebriedad
A la locura de los sueños
Esto es un capitalismo depredador
Predominan los rótulos en ingles
Estímulos de luces y colores
Se apagan y encienden
Y mas y mas imágenes aparentes etc.
Una sociedad sometida
Frente a mis ojos las escaleras eléctricas
Que suben y bajan la nostalgia de los pobres
Las normas imperiales su globalización
neoliberal
La realidad virtual de los anuncios
La dolarización impuesta
Las drogas los juegos de la mafia
Entre los traficantes el crimen organizado
Desde las instituciones estatales
El sol vibrante quema desesperante tus sentidos
He arribado a mi tierra sin laureles ni glorias
Entre estas horas de circunstancias atroces
Ángel o demonio soy en manos de otros
¿Cuándo mi país alcanzara una vida feliz?
Donde hasta la justicia misma
Tiene su precio privilegiado
No hay ley que te salve
En esta lapida sin nombre.
No es este el camino
en
que se vuelve a la patria
Lloro a solas duro es volver
a la patria
Me da miedo y esta angustia
por vivir
Se pierde hasta la esperanza
No es este el camino en que
se vuelve a la patria
Como hierro al rojo vivo
sobre la piel
Los golpes de la vida misma
Noticias diarias que asombran
Se denuncia l existencia de
la muerte
Hay llantos de niño huérfano
y abandonado
Y te quiebra los ojos
Cavando la basura hasta los
perros
Pena he sentido al llorar sin
querer llorar
Es el hambre del espíritu
De los explotados en el
trabajo
A sueldos miserables
Y de los desamparados sin
empleo
Aquí la sonrisa se ha perdido
Vengo de donde todo se bota
Y aquí todo se recoge
Miles de hambrientos piden
Limosnas en las puertas y
paradas
El viento sopla sobre estas
piedras
Acá llorar se ha vivido
El sol pispilea sobre su ojo
ardiente
No es este el camino en que
se vuelve a la patria.
Luego nos vamos como hemos llegado
Hay que retornar
Aquí en plena época de las
lluvias aquí
Allá me espera el invierno
Las tormentas y las nevadas
Cubriendo de blanco los
bosques
A finales del otoño
Casi todos los amarillos
rojos y anaranjados
De las hojas se van secando
Tardo en estar con los míos
En esta mañana frente a la
mesa
Las tortillas la sal un trozo
de queso seco
Los frijoles fritos con
cebolla
Chile jalapeño con ajillo y
tomates
Sobre el mantel florecido
Te recuerdo amada
Al vino tinto que empiezo a
libar
Allá a lo lejos los retoños
de la sangre
Un buen vaso de vino como
aperitivo
Un leve viento recobra tu
aliento
Muchos frutos del patio
penden de las ramas
Se acortan ya los días hay
que retornar
Yo amo en ti lo lejano de
nuestros deseos
Es el tiempo desespera o nos
tranquiliza
Sentados frente a la mesa
hablando
En tardes de café o chocolate
en la casona
Con torta mieluda de panela
Como la que horneaba con
dulzura
Mi tía Chabela Castaneda
Eres mi carne eres mi
tristeza de no despertar
Contigo cada mañana
Tu eres este país mío que amo
que sufro
Que me decepciona que me
frustra
Y lo guardo en el puno de mi
mano
Lo llevo en el bolsillo de
este corazón
¡Ay amor ¡No se puede educar
a los hijos
Sin la presencia del padre
Al fin y al cabo los hijos
terminan dejándonos un día
Siento que nos vamos quedando
Aquí también dejo lagrimas
La familiaridad del sueño de
la vida
Se nos va alejando día a día
El solo ciega mis ojos al
instante
Me pone frito de calores
sudorosos
La silueta de mi sombra
enrojece
Y ahora juntos nos vamos a
otra parte
Me llevo tus encantos tus
cosas
Tu rostro moldeando su brisa
de lamentos
Luego nos vamos como hemos
venido
Aquí donde muchos se fueron
Luchando por la paz y el
trabajo
Y por el buen vivir de todos
Aquí donde nos fuimos
A otros mares de extrañas
ciudades
Es duro forjar un carácter
No hay dolor tan semejante
No hay nostalgia tan grande
Que vivir la separación de la
patria
La familiaridad de los
hermanos
Los primos y los sobrinos
Y cola de perrito que baila
de alegría
La familiaridad de los
instantes
Ya nos vamos como hemos
venido.
Pájaro de los eternos dados del sueño
Alguien llega golpea a la
puerta
Los campesinos con su machete
desenvainado
El caminante y su sombra
Se asoman los pájaros
La luna de los ciegos
martirios
Los eternos dados del sueno
Mi sombra aparece y
desaparece
Una mujer se asoma a la
puerta
Soy extranjero en mi propia
tierra
El hombre habla solo en una
esquina
He aquí la noche atrapada por
el tiempo
Poblado de ruidos hay puertas
donde
Alguien dijo nuestro país es
inseguro
Sálvese quien pueda
No hay garantía de nada
Ni de tu vida
La sombra y el caminante
En sus pasos inertes
Pero hay una historia
Que se recuerda triste y
dolorosa
Ante los caídos los
desparecidos
Hay una historia de sangre de
coraje
Cuando un día intentamos
Tomarnos este cielo por
asalto.
Estoy poblado de gritos
Una hoja deslizándose
Entre el viento y el lomo de
la brisa
Estoy poblado de gritos
Entre el hiriente solo del
mediodía
Mi sombra gana la luz
Mientras las chozas pegadas
al rio
Deambulan sus fantasmas
Que aquí cayeron
Pues se fueron a la guerra un
día
Y hoy esos que asaltan a
pleno sol en los buses
El miedo con rostros de
espanto
Mientras viajamos caídos en
el sueno
De la muerte al filo de una
navaja
Se puebla de voces
Tengo mis razones escritas
En las piedras y en los muros
Síntomas de un nuevo cambio
Se propaga la noticia
En los periódicos y en la TV
La sombra y su caminante
En sus pasos inerte
Conspiran los caminos del
roto violín
Y uno quisiera que nadie
sufriera
Aquí se aprende a vivir por
nada
O se aprende a morir por
algo…
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