Fotografía: Roque Dalton
A la poesía
Agradecido te saludo poesía
Porque hoy al encontrarte
(En la vida y en los libros)
Ya no eres sólo para el deslumbramiento
Gran aderezo de la melancolía.
Hoy también puedes mejorarme
Ayudarme a servir
En esta larga y dura lucha del pueblo.
Ahora estás en tu lugar:
No eres ya la alternativa espléndida
Que me apartaba de mi propio lugar.
Y sigues siendo bella
Compañera poesía
Entre las bellas armas reales que brillan bajo el sol
Entre mis manos o sobre mi espalda.
Sigues brillando
Junto a mi corazón que no te ha traicionado nunca
En las ciudades y los montes de mi país
De mi país que se levanta
Desde la pequeñez y el olvido
Para finalizar su vieja pre-historia
De dolor y de sangre.
©Herederos de Roque Dalton,
Del libro: Poemas clandestinos.UCA-Editores, San Salvador, El Salvador, 2000.
A la poesía
Agradecido te saludo poesía
Porque hoy al encontrarte
(En la vida y en los libros)
Ya no eres sólo para el deslumbramiento
Gran aderezo de la melancolía.
Hoy también puedes mejorarme
Ayudarme a servir
En esta larga y dura lucha del pueblo.
Ahora estás en tu lugar:
No eres ya la alternativa espléndida
Que me apartaba de mi propio lugar.
Y sigues siendo bella
Compañera poesía
Entre las bellas armas reales que brillan bajo el sol
Entre mis manos o sobre mi espalda.
Sigues brillando
Junto a mi corazón que no te ha traicionado nunca
En las ciudades y los montes de mi país
De mi país que se levanta
Desde la pequeñez y el olvido
Para finalizar su vieja pre-historia
De dolor y de sangre.
©Herederos de Roque Dalton,
Del libro: Poemas clandestinos.UCA-Editores, San Salvador, El Salvador, 2000.
No hay comentarios:
Publicar un comentario