domingo, 1 de julio de 2012

TRES POEMAS DE ANA DELMY AMAYA AGUILAR

Ana Delmy Amaya Aguilar, El Salvador





TE ESCRIBIRÉ UN  POEMA


Un día,
o…  una noche
te escribiré  un poema  largo,
igual a  los hilos de lluvia que  penetran en  la tierra,
 igual al bálsamo  vertido en las heridas  de ayer
largo como los 32 años  que no te supe
que no te  oí,
que   no te vi,
que no te encontré,
que no te besé..
Un poema  que cubra la distancia implacable
Y el tiempo que llevo en los costados,
 un poema con  brotes de amaneceres tropicales
como los de la patria mía
como los ojos de la patria   tuya ;
largo, como las noches que se cierran con tu nombre
 y con el cascabel  del ayer 
del  ayer  joven ,
del  ayer tierno
del ayer beso,
del ayer, ayer ,ayer
guardado ;con sombras de guerra, y tiempo
(distancia y sueños);
 en estas  veinte mil vertientes de ríos caudalosos
donde   navega tu verbo y la luz de tus ojos.



FIESTA EN MIS TRISTEZAS


Afuera, ¡otra vez el invierno!
¡Otra vez!,
con sus nostálgicos emblemas,
con sus goterones pesados y sonoros
que  van  recitando   poemas,
con voces milenarias
2
Adentro , tu nombre,
tus palabras,
tu recuerdo,
mi  refugio,
 luz y  fuego
envueltos con palabras,
que  protegen  tu lumbre intermitente,
3
Afuera, sigue el invierno…
Sigue…sigue …
Y yo, en mi tiempo sin tiempo
 hago una fiesta que se sacude  mis tristezas



EL HILO DEL VACÍO


Escribirte un poema es acercarme
 a la piel de tu vida,
es entretejer tu sonrisa de entonces,
con las lunas que te envuelven en la distancia.
Escribirte un poema,
es acercarme a tu luz –fogata
Y pretender fusionarla con mi luz – incendio.
Es tomar tu noche  con las manos,
Y extenderla hasta   la mía ;
desde el geranio  de un suspiro,
 hasta la eternidad del   beso
que levita sobre el hilo inocente del vacío.

De ojos y bronces 
Tus ojos dejaron su huella sobre mi piel
por eso tiene el color de los bronces.
que repican tu historia y tu recuerdo de mañana,
tus ojos,--estrellas  de mis soledades--
inciertos y lejanos,
proyectos inconclusos sobre mis pupilas.
  ecos de una noche,
¡de esta noche!, 
que se enreda en tu recuerdo