sábado, 5 de abril de 2014

24 aniversario del 3000 en FILCEN 2014

César Ramírez Caralvá




ARTÍCULO




24 aniversario del 3000 en FILCEN 2014



Caralvá




Durante el desarrollo del Programa Cultural del día 04 de abril de 2014, el escritor Mario Bencastro presentó de su libro: Paraíso portátil, el cuento titulado: “Las ilusiones de Juana” el cual fue leído por niños de Ahuachapán. La voz juvenil de aquellos chicos tenía una connotación alegre y con tonos melódicos que recordaban juegos infantiles. El auditorio siguió atento aquél relato nostálgico de una participante de la diáspora de los años ochenta. “Juana salvadoreña de nacimiento y residente en Estados Unidos, experimentó una gran alegría cuando la guerra civil que flageló a su país por doce años finalmente concluyó. Desde entonces solía visitar su tierra natal religiosamente cada año para las fiestas de agosto.” Así el auditorio construyó una imagen de una mujer que tiene dos residencias en su corazón, unidas por un profundo sentimiento hacia su tierra natal y la realidad norteamericana. Mario connota el sentimiento de lejanía y vecindad de los emigrantes, mientras los niños que la leían expresaban ternura con su entonación musical. Mario es autor de novelas como: Disparo en la catedral, Odisea del norte y Viaje a la tierra del abuelo, además relatos como: Árbol de la vida.
Durante su presentación anunció que la segunda parte de su exposición tendría a un invitado especial, en homenaje al 24 aniversario del Suplemento Cultural 3000,   así Mario Bencastro me invitó a compartir algunas experiencias editoriales y vivencias de un acontecimiento cultural que mantiene viva la tradición de publicar sábado a sábado, la producción artística de los creadores nacionales e internacionales. En realidad no estaba en la programación, eso es “entrar por la ventana”, lo cual en pláticas previas le previne de tal acción, pero su respuesta fue: “en realidad no me importa si entras por el tejado como Chaim Topol (Violinista en el tejado), de aquél famoso filme. Así el escenario, acepté el desafío – no sería la primera ocasión para enfrentar el pánico escénico, ni arriesgarme para compartir un proyecto con un amigo- armado de una docena de periódicos del Suplemento 1244 que reseñaba el aniversario indicado, esperé como monje tibetano, en paz y en mucho silencio.
Había llegado preparado con una camarita de segunda mano, con mi esposa estrenándose en el oficio de fotógrafa, así captamos algunos momentos de esa inolvidable tertulia ampliada. Entre el auditorio: artistas, la familia Castro, amigos: Armando Molina, la Señora Ana Dolores Molina de Fauvet, así como los visitantes al FILCEN que con curiosidad nos veían contando anécdotas de un periódico que fue incendiado el 9 de febrero de 1991, entonces existió un final feliz ante la pregunta: ¿Quiénes desean el periódico?... y el auditorio se aglomeró por un ejemplar, no fueron suficientes, pero al menos compartimos el afecto del pueblo por su periódico Colatino, gracias a Mario Bencastro y a las autoridades de la XVIII Feria Internacional del Libro por permitirnos celebrar el aniversario… aunque la verdad entramos por la ventana.


César Ramírez Caralvá y el novelista Mario Bencastro



César Ramírez Caralvá, escribiendo autógrafos.



César Ramírez Caralvá, Mario Bencastro y Armando Molina.